miércoles, 23 de noviembre de 2011

El ciclo de la sombra

Como muchos otros días, sombra se dirigió al bosque. Los árboles se habían desnudado en sus copas, quedando abrigados con una fina falda de niebla translúcida y un mar de hojas sueltas. Sombra cruzó la pasarela y las hojas violaron su silencio, crispándose a su paso con millares de protestas y lamentos, pero sombra no era permisiva, ni piadosa, ni deferente. Sólo extraña. 
Sombra no quería estar al lado de nadie. Sombra quería ser alguien, y cuando se preguntaba quién, el viento respondía: hacía mover el polvo y sombra tenía que bajar la mirada, en ese momento la penumbra de las ramas formaba un extraño nudo de corbata y el alma medrosa de sombra se estremecía y encogía.
Como muchos otros días, sombra salió del bosque.

martes, 8 de noviembre de 2011

Mente cuerpo.

Una vez un ser se encontraba aislado pero con límites, incapaz de pensar por si mismo intentó pintar y dibujar... pero nunca encontró nada. Podía hablar pero no tenía boca, podía ver pero no tenía ojos, no podía sentir pero enloquecía. Corría en dirección contraria a los imaginarios soplos de aire para encontrar la salida a su celda, mas no la encontró. La habitación se fue oscureciendo y las oportunidades se fundieron como las velas. Lentamente. Finalmente encontró una solución, y la firmó: 
Atte. La conciencia.




Fuera, en el mundo exterior, alguien miraba con aprensión y desconcierto a un joven sin vida que sostenía una carta entre sus manos.

domingo, 16 de octubre de 2011

Cajita de veneno a domicilio

Cada día. A todas horas. Una adicción que me quema y me mata por dentro. Pero la mejor de todas, sin duda. Aspiro y espiro, me contagio y te contagio. ¡y qué viva la enfermedad si cuando muera morirás conmigo! Consecuencias y más consecuencias ¿por dónde empezar? yo responderé a eso. Empezaré por mi, por mi decisión. Empezaré por ti. ¿qué cómo acabaré? Te responderé con un encogimiento de hombros y una frase seguida de dos puntos: Recuerda que puedo dejarte cuando quiera. Cuando aún me queden fuerzas para soplar y soplar hasta que "fum"... desaparezcas.

domingo, 18 de septiembre de 2011

Querido diario, hoy no me alegro de verte

Y lo daría todo. Todo por aprovechar cada segundo que voy dejando atrás. Uno por uno sería como vivir de nuevo. Veo como todo ha cambiado, como empiezo a reírme de mí en mi diario de 2005 y como me entristezco leyendo el de 2011, descubriendo en esta época que es la única persona con la que puedo desahogarme. Una persona... ¿qué tontería no? Sin embargo, lo único que he conseguido aprender es que con el paso del tiempo todo parece menos doloroso y casi se asemeja a un lugar estable en el que vivir. Preguntándome que será lo siguiente, aunque si no me rendí antes, ¿por qué iba hacerlo ahora? Lucharé hasta el final. Incluso sin escudo y espada sigo teniendo las uñas.

lunes, 12 de septiembre de 2011

Tormento en tormenta

Agarrada a mi tazón de leche caliente con ambas manos me asomo a la ventana, donde una tormenta amenaza y azotea el cristal. Algo me oprime la garganta, estoy cansada y no consigo dormir. A penas diez minutos y siempre son pesadillas, pesadillas en las que alguien muere. La tormenta ha acallado cualquier forma de comunicación más allá de las cuatro paredes de mi casa. Debería relajarme y respirar, intentar no preocuparme por las dos que de alguna manera ahora son mis amigas y dormir de una vez por todas. Antes rezaba porque la lluvia repiqueteara contra mi ventana. Me gusta, de hecho. Ahora sólo quiero que termine, pero me aterra el saber que ha pasado, porque de alguna manera sé que haberlas dejado bajo estos truenos fue una mala idea. Algo me dice, muy en el fondo, que esta tormenta es diferente.

martes, 30 de agosto de 2011

¿Confías en mí?

Vamos, dímelo. Dime que escondes tras esa cortina de pensamientos. Puedes confiar en mí, sabes que puedes entonces, ¿por qué me callas con el silencio y una sonrisa de indiferencia? No me digas que no es justo, me preocupo por ti. Secretos, secretos, siempre rondando por tu mente y nunca se te ocurre que también pueden caminar por mi sendero. Me ha costado, pero lo he conseguido. Ya lo sé todo sobre ti. Te miro y veo más allá que los demás. ¿Perdona? Estaba pensando en ti, así que no he podido escuchar la pregunta. ¿Qué que hay de mi? Vaya... sonrío con indiferencia, mi vida es el fondo abisal, allí donde nadie nunca ha conseguido llegar, allí donde nadie jamás sabrá lo que habita y se cuece. Indícame el camino, me comenta, me susurra que lo se todo sobre él pero que él no sabe nada sobre mí. <<No es fácil, algún día lo sabrás>> susurro a su vez, <<Ha sido sencillo averiguar todo sobre ti y ahora te tengo atrapado, ¿desde cuándo la araña le cuenta a la presa su vida? Eso sólo tiene un nombre. Debilidad.>> pienso, pero por supuesto, no lo digo. Le acaricio la línea de los pómulos con ternura, pero no es lo mismo. No. Se acabó la diversión. Ya no me sirve.

domingo, 31 de julio de 2011

Así de simple

Al igual que un diente de león. Todos somos iguales, todos somos esa ínfima parte de la cual formamos. Es inevitable, sin embargo, escapar del soplo de aire que nos llevará lejos, como es igual de imposible que las olas se rompan contra las rocas, y allá donde halla un tsumani habrán más desgracias, porque como decíamos al principio, todo forma parte de algo, ¿podemos deducirlo, no? Es como si todo fuera un gran título con subtítulos, y todavía hay gente que se cree que es la portada de la revista. Injusto y nada que hacer al respecto, parece ser. Pero no voy a dejar que eso me amargue la vida. Sólo habrá un soplo que desmorone el diente de león, y no voy a quedarme sentada a esperarlo. 

jueves, 28 de julio de 2011

No le busques el sentido, NO TENGO NI IDEA.

- ¡Apresúrate o llegaremos tarde!
Intenté caminar más rápido sujetándome fuertemente el tórax con mi mano incapaz de respirar y con un profundo flato. 
- Pero..., ¿a dónde... vamos... a estas horas... corriendo?-dije sin aire- ¿Está todo...
Mi amigo chasqueó con la lengua y se dio la vuelta para observarme con una enorme sonrisa en sus labios.
- Verás...-rió nerviosamente- No tengo ni idea.
- ¡¿Qué?! -estaba atónito. Paré de inmediato recuperando el pulso y él hizo lo mismo- ¡¿Entonces que narices estamos haciendo?!
- No tengo ni idea-volvió a reír- No tiene sentido, ¿eh? Todo esto es demasiado aburrido porque nunca nos salimos del margen...
- Pe-pero...- lo miré con los ojos como platos- ¡A tomar por saco! ¡Me voy a dormir!- aterrado, me volví a dar la vuelta sombríamente hacia mi amigo- ¿Dónde estamos?
- No tengo ni idea- y de nuevo volvió a reír.
- ¿Sabes que te voy a matar por esto, no?- repuse con jovialidad.
- Bueno...-se encogió de hombros- No es una novedad.

lunes, 25 de julio de 2011

Rumbo norte en las profundidades del hielo

Mis labios amoratados se despegaron pero no pude emitir ningún sonido, a penas un leve trague de vaho y un rechinar de dientes. Tumbada sobre el lago helado, sin poder llorar, con el rostro crispado en escarcha y los músculos entumecidos. ¿Me ves como yo te veo? A través del grosor del hielo, a penas 2 centímetros nos separan, esa fina capa de superficie. Yo respiro inconscientemente, un acto involuntario Tu te ahogas bajo mí flotando en el agua helada conscientemente, un acto inevitable. Mis párpados a penas se mueven, mi iris navega en busca de tu mirada perdida. Y no. Mi cuerpo no se convulsiona, no solloza, no da signos de tener corazón a pesar de que se asemeja a una colmena, al igual que tú, que sin dar signos tampoco, te hundes cada vez más y más en las frígidas profundidades de la linfa, hasta que al fin o para mi desgracia desapareciste de mi mapa de perspectiva. Y no. No dijiste adiós. Todo fue más transido que el paisaje que me rodea. Álgido e indiferente.

lunes, 18 de julio de 2011

Estrés

Me asfixiaba en mí mismo. Me retorcía estrujado por el fuerte abrazo de la desesperación, como si mil escamas de serpiente oprimieran mi interno. Así mismo, su voz de lengua bífida silbaba a mi oído sutilmente pero inexorable, elegante y fría, como si en vende sonido entre sus labios se filtrasen finas agujas de un dolor intenso. Se levantaba en mi el cansancio, se me bajaba el ánimo, mi corazón estaba listo para la letal mordedura. Primero silencio, luego cosquillas, finalmente me rechinaban los dientes y yo gritaba por dentro. En aquellos días bárbaros y retorcidos, tan estresantes que el sudor caía como lluvia por mi frente, no necesitaba cosa tan sencilla  que la mortal mordedura de serpiente. Fría y calculadora, pues sólo se limitaba a herirme, a regocijarse mientras me retorcía en mi mismo, y yo esperaba a que algo cambiase, a que las vacaciones debilitaran su existencia.

viernes, 15 de julio de 2011

Cúpula de notas mortales y solitarias

Así era su vida. Una dulce melodía que acaricia un pentagrama, cada nota que le hacía cosquillas en lo más hondo, cada cuerda que se tensaba y vibraba produciéndole un escalofrío que comenzaba en la yema de sus dedos. Cerraba los ojos y dejaba que cada sensación la llenara por dentro. Inspiraba y expiraba, una y otra y otra vez hasta que le ardían los pulmones, hasta que sus labios resecos suspiraran de nuevo con cada silencio marcando el paso de los compases. Y así, como ella misma, se unió a su instrumento solitaria a emprender un camino sinuoso y pobre, donde ambos se alejaron. Para siempre.

martes, 5 de julio de 2011

Reminiscencia de una infancia

Ella era una niña pequeña. Ella caminaba sola por el patio y miraba a los lados con los ojos abiertos pero su boca siempre permanecía cerrada. Por alguna extraña razón sentía como todo el mundo esquivaba sus pasos o simplemente se centraban en fingir que no estaba presente. Ella lloraba, se sentaba en una de las pistas del patio y buscaba con la mirada perdida una piedra con la que poder pintar el suelo y entretenerse un rato mientras los demás estaban con sus amigos. Ella era la primera a quien apartaban y la primera en ofrecer por compasión. Ella se preguntaba si en alguna ocasión algo cambiaría, si rezar o hablar con el espejo como si se enfrentase a los demás iba a solucionar la situación. Pero ella seguía llorando y aceptando las humillaciones como si fuesen latigazos, como si alguien se entretuviese ahogando su corazón. Y aquí estoy yo para volver atrás, para darle la mano y decirle que no haga nada de lo que pueda arrepentirse porque las cosas sí cambian, y lo hará una gran persona que en la vida olvidará. Por experiencia lo sé...

domingo, 3 de julio de 2011

Realidad

-Hola- te acercas y le das dos besos.
-Hola- te corresponde a los dos besos.
Un pequeño saludo acompañado de todo un día juntos. Compartiendo chistes, risas, miradas clandestinas y un palpitante corazón. Sin darte cuenta en tu cabeza empieza a formarse un futuro de los dos juntos, de cosas que podrían pasar, de alegrías, de tragedias que terminan con tu y él juntos. Sonríes ante la idea y piensas que esa persona ya es un tal vez o que incluso podría ser un para siempre. Los besos, las caricias, los abrazos, los reencuentros, las lágrimas... Entonces abres los ojos y miras a tu alrededor. No, no es un sueño, tu has conocido a esa persona, esa es la realidad... ese es el problema, en la realidad... todo se quedó ahí, en un futuro sin sentido que sabes que nunca ocurrirá. Y se te hace más nítida la idea de que nada de eso ocurrirá cuando pasan los días y su imagen se hace más borrosa, cuando casi desaparece.

viernes, 24 de junio de 2011

y bla bla bla

Como con cada tomo de aire se rompe el viento, día a día, minuto a minuto respiro. Sentir que algo puede ser interminable, empezar a ver el futuro no como algo planeado si no como presente. Cuando las luces de neón me señalen el camino a seguir desviaré mis huellas, ¿por qué seguir un ideal? Sus reglas están para romperlas porque yo cumpliré las mías. Qué placer el sentir que atraviesas la puerta con el letrero <<yo mismo>> Dejarlo todo atrás, empezar de cero y marcar un punto y a parte en mi vida. Empezaré un nuevo capítulo y lo terminaré con mi presente, no importa el cómo, el cuando, el donde, ni el porqué y nunca volverás a saber nada del punto y final... NO EXISTE.

domingo, 19 de junio de 2011

Cuando

Cuando las sonrisas truenen en la tempestad y mi ego alcance el cielo,
cuando el miedo tenga miedo y huya de mi alegría,
cuando la pasión le de la mano a la timidez y juntos sean amantes,
cuando la única bomba que estalle sea mi risa,
cuando las velas se fundan a la luz del día,
cuando cinco sea seis y te quiero signifique gracias,
por eso, con mucho cariño,
cinco besos y gracias a todos.

miércoles, 8 de junio de 2011

Jaque Mate

Yo moví mi primera pieza del tablero de ajedrez. Aquel fue el momento determinante, tocaba decidir lo que sería en la vida. Alguien protegida por los demás o alguien que lucha contra la adversidad, contra viento y marea. Se me presentaron ante mi los retos más duros acompañados con inoperancia, pero con perseverancia los reté y los vencí uno por uno, aunque una parte de mi cambiara con cada casilla. Cuanto más cerca estaba del final más miedo me entraba. Era inexplicable, no sentía incertidumbre por ganar si no más bien algo me oprimía el estómago y me decía <<no te acerques>>, ironías de la vida porque una vez comenzada la partida ya no había marcha atrás. En fin, así fue como llegué al final de mi camino, de mi jugada perfecta y ¿cuál fue mi recompensa? Un papelito en el que decía <<Gracias por participar>>

martes, 31 de mayo de 2011

Mi cuento

Las palabras se me deshacían de las manos cual grano de arena se me escapaba de entre los dedos. Mi boca tartamudeaba en busca de las palabras perdidas, y mis ojos se disociaban a este movimiento, abiertos de par a par observando al sol incandescente que se abría paso entre los pupitres, el más bello amanecer que jamás hubiese visto. Mi amanecer. La dulce existencia más preciada que se me hacía irresistible. Mi cuerpo estallaba en alegría y se me quebraba el aliento al pensar como sería tenerla entre mis brazos y besarla cada día. Abrazarla y sentir por un momento que el universo era mío. Dormir bajo sus delicadas nanas de amor pasajero y cuentos posibles tras la voz de luz que se filtraba por sus labios. Un día iluminado me levanté y te hablé. 
Así empezó todo.

sábado, 28 de mayo de 2011

Es para siempre

Y  ¿cómo explicarlo? Es sencillamente práctico y no teórico. Ningún libro me explicó que ibas a ser tú y nadie me dio instrucciones. Nadie excepto yo misma. Ahora me encuentro en frente tuyo. Mi mirada indomable va de tus ojos a tu sonrisa. De luz a luz. Podemos decir que nos estamos acostumbrando, que la magia que había al comienzo de la relación se está deteriorando, pero ¡eso es mentira! ¿es que acaso no ves que todavía sonrío al verte? que si discuto más contigo no es porque ya no tengo miedo de perderte, todo lo contrario, eso me aterroriza pero...eres tú la huella que se ha clavado en mi alma, y eso, cariño, es para siempre.

jueves, 19 de mayo de 2011

Sólo yo

Una oportunidad de construir la sonrisa más brillante que jamás haya existido. Sólo tengo que intentarlo, dejarme llevar por las olas sin importarme si las rocas me pararán por el camino. Así que dime que tengo que hacer y empezaré ahora mismo. Aquí estoy, para siempre. Buscando al sapo y no al príncipe. Actuando por lo que soy y no por lo que he sido creada. Yo marcaré mis límites y tomaré mis decisiones. Es hora de elegir. Es hora de elegirme a mí misma y cometer mis errores. Llorar, gritar, correr, cantar ¿qué más da? Así soy yo, y eso nadie lo va a cambiar.

jueves, 12 de mayo de 2011

Estoy aquí mi ángel de luz

Te escribiré las cartas más bellas que jamás hayas leído. Proyectaré nuestras almas en una imagen y las guardaré con llave en mi memoria, y mi memoria eres tú, y tú eres mi corazón. Dejaré que seas el primero que tome mi mano y me de un beso, aunque te me vayas de mis manos, aunque nunca sea suficiente nunca dejaré de luchar con la misma fuerza con la que estoy luchando para animarme a hablar contigo por primera vez. Vivo con la esperanza de que alguna vez oigas los latidos que tan fuertemente laten por ti, que te des la vuelta y que me digas lo que sea luz de ángel, porque sólo quiero escuchar tu voz.

sábado, 7 de mayo de 2011

Mis peldaños

Subía los peldaños de la escalera de la vida. Uno por uno, seguí adelante. Aprendí valores, y cada uno que aprendía me hacía sentir más realizada. Cada momento me indicaba un sueño, algo que debía cumplir, y la escalera se hacía mas empinada. Sabía que me costaría, porque la vida no es fácil. Y entonces llegaste tú, a mi lado. Toda mi vida me sentí completa sabiendo lo que sabía. Y ahora me imaginaba aquella vida y me sentía vacía, porque no estabas conmigo. Y no me dejaste de enseñar, y aprendí con asombro que no tenía que subir los peldaños, si no bajarlos y enmendar mis errores, que nunca era demasiado tarde. Iba a ser el mismo destino tanto si las bajaba como si las subía, pero decidí ayudarme a mí misma antes que cumplir mi sueño. Ya no me hacía falta, lo tenía a mi lado. Eras tú.

miércoles, 4 de mayo de 2011

Quédate conmigo

Aveces sueño con que mis problemas son una pluma... una tan ligera que apenas con que suspire ya vuela lejos de mi, sin hacer daño a mi corazón ni partiendo mi alma en dos. Porque las cosas más insignificantes como una pluma son las que más dolor causan con el paso del tiempo. Pero no sería nada sin ella, ¿qué sería el lobo sin tener una casa a la que soplar? ¿qué serían los sueños si no tienes un problema que idealizar? Somos lo que somos por esa frágil pluma que se balancea en nuestra consciencia, recordándonos que seguimos vivos, porque si no tengo algo por lo que luchar, no tengo nada por lo que vivir.

miércoles, 27 de abril de 2011

Que comience el espectáculo

Cuanto más grande sea la carpa del circo, más se podrá engañar al público. Y eso es lo que ha pasado con nuestro mundo. Bastó con encontrar un mago. Alzó su varita mágica y nos llenó de falsas promesas. Sabes que si descubres su truco, la magia desaparecerá. Pero siempre necesitamos a un líder... ¿y dices que eres independiente? Me aterra la cuerda floja en la que nos sustentamos, la ingenuidad y cobardía que se apoderan de nuestro ser aceptando las barbaridades que salen de sus labios. Pero de lo que más debemos de protegernos es de nosotros mismos... porque la magia más poderosa que existe es nuestra mentira contada a nuestra propia conciencia.

domingo, 17 de abril de 2011

...

Es raro sentirse de esta manera. Siempre decimos <<ojalá se pare el tiempo>> pero ahora que estoy en la situación no lo siento como creía que lo sentiría y desearía. Lo que intento decir es que si pienso <<que se pare el tiempo>> me doy cuenta de que eso no es lo que quiero. Pero tampoco quiero que vaya tan rápido. Creo que lo que me faltan son horas. Aprovecharía esas en las que desperdiciaba el tiempo, en las que veía anuncios que no tenían sentido... y este comentario es sarcástico ya que para lo único que quiero el tiempo es para tumbarme en la cama y esperar. Esperar y esperar. Pensar en nada, porque si pienso en todo, me echo a llorar.

viernes, 15 de abril de 2011

Memorias del día y la noche.

Las mañanas eran eternas... lo eran. Cuando él me balanceaba en sus brazos y me susurraba que me quería. Pero esa era la excusa de ambos. Él decía que lo hacía porque me quería. Yo pensaba que tenía razón, lo pensaba incluso sabiendo que ahora la noche era eterna y que él único ápice de luz mañanera eran las pocas estrellas que parpadeaban en la oscuridad. Me imaginaba que esas estrellas sustentaban la negrura, y cada una de ellas era como había dicho antes, una excusa. Porque me quiere, porque me protege, porque se preocupa... y así cada una de ellas. Pero aquello me desgarraba el alma y finalmente, me destruyó el corazón. Ya no quedaban estrellas.

viernes, 8 de abril de 2011

Un día extraño

Hoy es uno de esos días en los que veo que no encajo con la fotografía que me muestran mis ojos. Siento que mi yo interno se encuentra a miles de kilómetros de mi, en otro punto que no logro saber donde está. Sé que es en un lugar en el que ya he estado, pero no logro recordarlo. Todo es distinto. Esa sensación... el olor, las expresiones, cada paso monótono me induce a cambiar de dirección pero no puedo cambiar mi destino, porque sé que después del instituto tengo que llegar a casa. Me muero por dejar la mochila en el suelo y comenzar a caminar a otro objetivo sin que nada de esto me importe. No obstante sé que no debo hacerlo, no lo hago y no lo haré mientras me abrace a las normas por miedo a romperlas. Podré encerrarme en casa, podré hacer todo lo que suelo hacer cada día y podré tumbarme en el suelo helado para refrescar mis ideas tan calentadas por estos días casi de verano. Pero lo sé. 
Hoy no pertenezco aquí.

sábado, 26 de marzo de 2011

Crisálida.

Me hallaba en medio de la nada, encerrada en una crisálida de cristal.  En ella, flotaban dos cajas cerradas con las que mi mirada oscilaba de una a la otra deliberando cual debía abrir. Sólo tenía una oportunidad, sólo podía decidir una posibilidad. A través del cristal que me envolvía, podía imaginarme mi futuro y las consecuencias que  traería. Pronto, muy pronto, lo único que vería serían cristales rotos, y la luz empezaría a bañar mi piel, la de una persona que se estaba haciendo adulta. Caminaría por senderos desconocidos abrazando la caja que había escogido. Lo qué no sabía, es que las dos cajas estaban vacías, y dependiendo de cual de ellas hubiera optado a elegir, la iría llenando de recuerdos, errores, o brevemente dicho, de mi vida. Aún así, aunque hiciera tiempo que hubiese abandonado mi cascarón, me sentía como si aún me protegiera mi crisálida de cristal.

jueves, 10 de marzo de 2011

Sólo una vez más... te lo suplico.


Envié cien mil palomas mensajeras y ninguna volvió. Inundé continentes con mis lágrimas pero la corriente no me llevo hasta ti. Dormí junto a tu lado mas nunca me acariciaste de nuevo. Un bloque de tierra nos separaba al uno del otro, y ahora me pregunto, ¿se superan todos los obstáculos? En mis quimeras más profundas fantaseé con decir tu nombre, pero los primeros rayos de luz siempre me arrebataron tu presencia y me fue imposible volver a esa fantasía onírica de la que tanto disfrutaba. Caminé por el mundo con los ojos vendados para no ver la tristeza y desolación que había conquistado hasta el lugar más recóndito de mi corazón, pero mi todo eres tú y no puedo evitar recordarte. Y tú, ¿me recuerdas? ¿recuerdas nuestra época de delincuentes? ¿cuándo tú me robabas los besos y yo el tiempo? A ti te capturaron y no volviste......no..... nunca volviste.

sábado, 26 de febrero de 2011

Recuerdos

Recordamos lo que queremos recordar. Captamos el alma en una fotografía. La guardamos para siempre. Tiempo después, te acuerdas del álbum del estante. Limpias el polvo como si se tratase de tu regalo más preciado. Lo abres y cada página es un momento, uno en el que piensas en las cosas buenas y malas que te ocurrieron, pensabas que eras lo suficientemente mayor... lo suficientemente madura. Lo único que quieres es volver atrás, aunque a los 10 años tu deseo era tener los 18, los 25, ser una de esas chicas independientes que paseaban su frescura eclipsando la calle. Si tan sólo hubiera deshecho ese pensamiento y hubiera disfrutado cada uno de los segundos de aquel día. A veces lo hacíamos, y es cuando sonreímos recordando. Primero tuvimos miedo de los monstruos, luego de las películas de terror que veíamos escondidas en la oscuridad de la habitación, más tarde de equivocarnos, de no llegar a ser la perspectiva, hasta que pasados unos años, nos damos cuenta que de quien de verdad tenemos miedo, es de alguien de quien no se huye con una sábana, es esa cosa que ni los amigos ni los héroes de las películas pueden ahuyentar, nadie puede ni lo hará. El tiempo... algo que de pequeños queremos que avance y de mayores, que retroceda. Pero el dejará caer la arena omiso a esos pensamientos.

jueves, 24 de febrero de 2011

El recorrido de un vínculo

Cuando somos pequeños, lo único que deseamos es que nuestra madre nos zafe de su entrelazo de manos sólo para cruzar tu solo la carretera. Luego este acto se va convirtiendo en algo más profundo. La independencia. Lazos unidos, vínculos que anhelamos cortar para ser un alma frente al mundo, alguien que no le teme a nada, ocultados bajo esa máscara que nos obliga a ponernos la sociedad para no ser menos que los demás. Personas lo hicieron. Se soltaron de su mano para seguir ellos solos el camino y cruzar la carretera. Se agarraron a otras que se cruzaron en su camino. En un caso diferente, la mano nunca escogió a ninguna que se le presentó y siguió las líneas blancas que le condujeron a la salida. Los coches, camiones, son grandes obstáculos que siguen vigentes, dejando a veces huellas tan grandes que es imposibles no ahogarse en ellas, en ese humo de amargura con el que oscureció la luz del túnel haciendo imposible el avance, haciendo posible la desolación.

lunes, 21 de febrero de 2011

Ojo por ojo, diente por diente: Bea

Hace 10 años no podía augurar mi situación actual. Me preocupaba tan sólo de que me dejaras al ordenador, y no llegaba a entender como podías pasar tantas horas sin levantar la vista de la irradiante luz que emitía la pantalla, y ahora me paso noches en velas hipnotizada por la misma fulgor que tantos días juré  y presagié que no me seduciría.
Hace 10 años no podía entender porque envolvías tu habitación de papeles, como si se tratara de un regalo que trataras de envolver. El problema es que en aquella época no tuve el valor de abrirlo, y me limitaba a tirarte de los pelos y gritarte como si mi vida fuera en ello. ¿Quién iba a decirme que bajo aquel techo encapotado de pósters escondías tu personalidad?
Y no ha sido hasta ahora cuando me sorprendo de quien eres. 10 años conviviendo y nunca me paré a pensar en tus decisiones y actitudes, fue como ver pasar tu vida en diapositivas que lo único que me transmitían era la incomprensibilidad. No es hasta ahora cuando consigo atravesar las apariencias y observo tu corazón, tu alma. Vuelvo a sorprenderme de ver algunos trozos rotos, de piezas que no terminan por encajar, y me pregunto si te llegaba a conocer del todo, aunque sé la respuesta que conllevaría esa pregunta, y no me voy a rendir tan fácilmente

viernes, 18 de febrero de 2011

El valor de un abrazo


Exijo que pares tu pasos y levantes la vista.
Bien hecho,
Ahora quiero que te enjuagues las lágrimas y que empieces a correr.
Deseo que extiendas tus brazos y te aferres a su presencia.
Ahora cierra los ojos, esconde tu rostro en su cuello, sonríe y respira. Deja que su perfume domine tus latidos, deja que su voz limpie tu alma.
 Solamente... deja que te abrace.

lunes, 14 de febrero de 2011

FeLiZ San VaLenTin!!!



Navegamos por un mar de sentimientos en busca de uno concreto. Lo buscamos por cada gota de agua, por cada gramo de sal, de arena... pero no tenemos suerte y desembarcamos.
Volamos con rumbo perdido con la segura conciencia de que seguimos las huellas correctas, mientras batimos abstractas alas en busca de un ángel. Esperamos que Cupido lance mil flechas al corazón de nuestra imaginación, aquel que ya tiene un nombre y una personalidad. Recorres cada recóndito lugar del cielo hasta que decides que es hora de aterrizar.
Viajamos hasta la Luna en busca de esa perfección, con la seguridad de que nuestro extraterrestre nos aguarda sentado en su superficie iluminando con una sonrisa esos claros de luz que nos mostraba en las noches más oscuras. Nos reímos de nuestra ingenuidad al no haber dado antes con aquella conclusión, y así avanzamos por las numerosas hendiduras del lugar, obstáculos que poco a poco vamos atravesando a la vez que nuestra sonrisa va desapareciendo. Pero esta vez tampoco ha habido suerte, y te planteas la posibilidad de ser un pez demasiado pequeño para un mar tan grande, de clavarte tu propia flecha y vivir acobijado por la soledad.
Bajamos a la Tierra y caminamos por una llanura. Empezamos a seguir nuestros propios pasos y no las huellas. Poco a poco aquella tristeza parece atenuarse, y dejamos entrever más luz de lo que jamás lo habíamos hecho. Ahora somos nosotros mismos, no nos importa lo que piensen los demás, porque tus amigos te conocen de sobra y tu a ellos también. Pasan los días, y aquella flor que habíamos considerado marchita, observamos que vuelve a crecer. Este agua que la rejuvenece no es utópica, y está ligeramente contaminada, pero a pesar de lo que nos quejamos de ella, ¿la cambiaríamos? Dejamos que siga bañando con sus gotas de rocío a la rosa. Vemos que cada día es más bella, y no es hasta que sonreímos cuando nos damos cuenta de que esa imperfección es la que queremos, y es la que estábamos buscando. 

domingo, 13 de febrero de 2011



Un día abres los ojos y piensas que la vida no vale la pena. Otro día los abres con las personas más maravillas de tu vida y piensas que sí. No todo depende de que el primer pie que toque el suelo sea el izquierdo, ni que de camino a clase se te cruce un gato negro, a pesar de todos los intentos de tu mejor amiga por espantarlo antes de que osara cruzarse. Pero en todo día, hay una planificación. Te levantas, desayunas, haces la cama, el instituto, estudiar, ver la tele... irónicamente, todo lo que siempre planeamos hacer minuto a minuto no suele pasar. Por ejemplo, ahora estoy escribiendo estas palabras, mientras debería hacer la cama; me debería haber levantado tarde, y lo he hecho a las ocho y media de la mañana; debería hacer la comida, y sin embargo me quedo estudiando historia... Mi horario va decayendo poco a poco en el olvido, en la nada, mientras dejo pasar a la luz de la improvisación y la locura. Pero, ¿a quién no le gusta? Todos necesitamos algo diferente cada día, distinto a la monotonía en la que nos sometemos. Siempre intentamos cambiar, desde el detalle más insignificante como las uñas hasta la propia personalidad <<Hoy seré más valiente, más tajante...etc.>> Y así es mi vida, algo no planificado que sinceramente, me encanta.

jueves, 10 de febrero de 2011


Intentó lo más rápido que pudo salir de aquel macabro sitio en el que había osado adentrarse. Pero ella no lo había elegido de esa manera. Esa no era la forma por la que había decidido vivir. Muchos, se obcecaban con un ideal megalómano y egoísta, podían tener facetas buenas, como la humildad y la caridad, pero cada vez eran menos redundantes y la ignorancia conseguía destruir aquellos muros formados por afables pensamientos. ¿cómo habíamos llegado a tal situación? Ella, sin embargo, era diferente, quería ser menos, deseaba olvidarse de todo, ser una ingenua, no le importaba a qué precio, pero, ¿era eso posible? ¿qué clase de atracción era la curiosidad? Sí, aquella quien le llamaba cuando veía un sobre, cuando veía caras largas o de pura felicidad, ¿por qué ese afán por conocerlo todo? ¿cómo una semilla tan inocente podía ser la madre de tal catástrofe? ¿de tales desgracias? Y ahora cometía el error de rociar a los demás con la misma agua que había regado su semilla. Pero tal vez fuera diferente, puede que las cosas salieran mejor de lo que ya estaban. Conocía también aquel sentimiento. Venganza, justicia, una rara fusión en la que no sabía quien ganaba la carrera. Pero la base era la misma. Por qué hacer sufrir a los demás, ¿por qué? Eso era fácil. Las cosas no suceden en vano y siempre, siempre, traen consecuencias. Como jugar a una partida de dominó, esas que al derrumbarse todas forman una figura , tu caes, y sabes quien será el siguiente, aquel que vive en plena normalidad y observa extrañado como la vida puede cambiar en cuestión de días o simplemente, en cuestión de horas. Se llevó las rodillas al pecho y las rodeó fuertemente con los brazos, mientras hundía la cabeza y volvía a llorar en el fino vestido desteñido que llevaba – Las preguntas no cesaban, y el dolor de cabeza era tan inmenso que ya superaba el dolor físico. Los mismos golpes que recibía en el cuerpo, eran fuertes bazas contra su mente, quien cuestionaba y cuestionaba, una y otra vez ¿por qué?, pero los labios estaban fuertemente sellados, incapaces de pronunciar una sola palabra que la contestara, a pesar de la nueva oportunidad de responder que llegaba con cada impacto. Cada puñal que le clavaban, mientras aquella mirada traicionera la observaba, sin inmutarse si quiera, sin ni siquiera mostrar el más mínimo ademán de ayudarla como en un tiempo antaño, era una estaca que se introducía en su corazón, hiriéndolo en lo más profundo. Volvió a intentar salir de aquel sitio sin esperanzas. No. Ella no lo había elegido. Ella no había decidido nacer en este mundo, uno del que era imposible escapar tanto vivo, como póstumo. Encadenada para siempre en una jaula sin llave, ni cerradura.